FANTASÍA INFANTIL

Un trío de cintas que ubican a niños como puentes entre mundos que coexisten aún sin saberlo. Además de lidiar con sus propias realidades familiares y escolares, de pronto se ven asumiendo misiones para las cuales tendrán que prepararse casi de inmediato, sin pensárselo demasiado. Es la imaginación infantil capaz de ver lo esencial vía el corazón (El principito dixit), mientras que los ojos adultos se mantienen ciegos y sólo alcanzan a ver sus narices, aunque luego le entren también al quite. Veamos.

1. Dirigida por el húngaro Gabor Csupo y basada en la novela de Katherine Paterson, El mundo mágico de Terabithia (Bridge To Terabithia, EU, 07) es una conmovedora incursión a un bosque encantado cual espejo de la realidad cotidiana, con sus respectivos miedos, triunfos y angustias que parecen traslaparse de uno y otro lado del río, cual frontera que sólo puede cruzarse a través de la cuerda mágica en apariencia resistente. Un mundo mucho más allá de lo que puede ofrecer la televisión y que requiere, de entrada, una buena dosis de imaginación.

En tono más dramático que épico y eludiendo la espectacularidad, nos centramos en un niño molestado en la escuela y regañado por su padre que hace migas con la alumna recién llegada; ambos empezarán a vivir una aventura única en una doble realidad. Con buen desarrollo de los personajes centrales y una emoción centrada más en las relaciones que se establecen que en la propia acción, la cinta apuesta por la humanidad de sus personajes, incluyendo sus transformaciones, soportada por discretos efectos especiales y una fotografía funcional. La amistad como plataforma para explotar la propia imaginación.

2. Dirigida por Ricardo Arnaiz y con imaginativa participación de nuestros paisanos de EsComics!, La leyenda de la Nahuala (México, 07) es un loable esfuerzo por crear una cinta de animación que igual se sostiene por la creación de sus personajes, más que en el derroche tecnológico tan usual en las producciones estadounidenses. Si bien por momentos los protagonistas parecen ajenos a las logradas escenografías y al inicio priva cierta dispersión, la cinta consigue despegar cuando se introduce de lleno en la mansión embrujada donde la susodicha pretende hacer de las suyas.

Un niño temeroso tendrá la oportunidad de enfrentar sus peores miedos cuando se ve obligado a salvar a su insufrible hermano, atrapado en la famosa casona. Contará con el apoyo del cura, de un locuaz caballero, un alebrije, la abuela, la panadera jarocha y fantasmas de todo tipo que habitan los dominios de la Nahuala, recuperando una historia mexicana en medio de las múltiples influencias externas sobre la fiesta del día de muertos, como para que nuestros pequeños tengan la oportunidad de conocer algo más que las calabazas y las brujas.

3. Dirigida por David L. Cunningham y basada en la novela de Susan Cooper, Los seis signos de la luz (The Seeker: The Dark Is Rising, EU, 07) no consigue trasladar el original a la pantalla y se queda como una adaptación más bien caprichosa, en la que falla la secuenciación y se extraña a un villano de mayor envergadura. No faltan, sin embargo, los momentos de cierta emoción ni los episodios de indudable espectacularidad, a través de un adecuado aprovechamiento de recursos visuales e ingeniosas perspectivas de cámara.

Estamos una vez más frente a un niño llamado a cosas grandes que empezará a desarrollar poderes para cumplir con la trascendente misión que le ha sido encargada. La premisa suena demasiado familiar, en esta batalla entre la luz y la oscuridad que tiene como elemento clave a un niño/joven cuyo origen se revelará de pronto. Ante esta limitada estructura narrativa, se tendrá que recurrir a idas y vueltas en el tiempo con peleas incluidas y personajes de dudosas intenciones que terminan sin mayor sorpresa, reduciendo la intensidad a efímeros momentos.

Fernando Cuevas

Nos leemos después.

Comentarios: cuecaz@prodigy.net.mx

No hay comentarios: