[Diciembre 5 de 2007]
Como cada miércoles, después de ver en el televisor la serie Sister & Brohters, se sentó en el sillón ejecutivo para revisar la agenda, con el aliciente –así lo escribió- que comenzó a hacer algunas anotaciones en la agenda de 2008. [El libro –forrado en piel de cordero- se lo obsequiaron en la Universidad del Valle de México, campus Aguascalientes, a donde acudió como panelista a las Primeras Jornadas de Investigación Educativa y Documentación de Experiencias Docentes. Ahí habló acerca de la masonería y de las formas de instrucción entre sus socios. Los otros expositores fueron sus amigos Eduardo Cardoso, René Amaro, José Luis Acevedo y Mariana Terán Fuentes.]
Interesado en concluir los pendientes y en procurar definir las prioridades del semestre próximo, no se aventuró a poner el disco seis de la temporada uno de West Wing. Primero optó por registrar las libretas de las anotaciones cotidianas; pero se detuvo en ellas, leyó detenidamente parte de los pasajes que tienen los cuadernos… y lo hizo sin música, pese a que tenía de uso continuo el CD de A Brokedown Melody. Primero abrió la Urman©, la que tiene pasta ilustrada con una de las obras de Vincent Van Gogh –es la que utiliza para escribir los guiones que comentará-. Ahí vio las ideas que anotó para formar el texto que leyó en la presentación del libro Juárez su obra, su tiempo y su mundo jurídicos. [Este lo coordinó José Enciso Contreras y lo editó el Poder Judicial del Estado.] En una nota al margen asentó que los párrafos iniciales provenían del texto que redactó para el prólogo de un libro de don Ernesto Juárez Frías, mismo que aborda el transcurrir del presidente Juárez por el territorio de Zacatecas. [El libro, al no aparecer en el periodo de las celebraciones oficiales del bicentenario del presidente liberal, le generado el escepticismo de sí el impreso tampoco circulará en la comunidad.]
No lo dirá, ni lo asentará, pero del último párrafo que leyó, es el que más pensó y enfatizó [en el dice]: “Y como el título del libro lo señala, se hace hincapié en la perspectiva de la nueva historia, la que analiza sin monumentalizar con datos. En este documento se proporciona el contexto de Juárez García y el legado que propició su investidura y las leyes que le correspondió promulgar. En este sentido, el libro antes que un monumento don Benito Juárez, se presenta a Juárez que es un abogado que litiga, que discute en los tribunales, es un abogado que se integra a una sociabilidad de pares abogados, es alguien que participa en política, es un político y es un sujeto del poder legalmente constituido. Es también un escritor y un lector. Los ensayos del libro que se presenta nos proporcionan notas comprensivas sobre su dirigencia extremadamente legal y, distintivo del siglo XIX, de su dirigencia legal rutinizada al dominio tradicional”.
La siguiente libreta que ojeó fue la Urman©, la que destinó para las notas de su tesis. En ella se detuvo en las hojas que contienen las referencias de las publicaciones periódicas de las logias mexicanas. Procuró localizar más datos que le ayudaran a cerrar el ensayo que redactó para un coloquio sobre periódicos decimonónicos que se celebró en Morelia, en el mes de octubre. Recorrió las hojas, pero sabía que no era necesario citar más, sino que el acto necesario y siguiente era reflexionar, para continuar con la construcción del corpus hemerográfico masónico del territorio mexicano.
De la libreta transcribió tres párrafos. No dudo que en su momento también los traslade a la tesis, porque justo son de las líneas que más le interrogaron en el coloquio. Por cierto, los párrafos que utilizó provienen de redacciones que hizo en días distantes. Esto se nota tanto en el color de las tintas, que son en azul y en negro [pero ambas provienen de plumas Bic Grip Roller©], como en las referencias bibliográficas que colocó en los márgenes de las hojas respectivas. El primer párrafo dice: “Además de ser una asociación formal voluntaria, la masonería es una sociedad de hablar y de escribir, por lo tanto es formadora de opinión. En su seno, los asistentes dialogan permanentemente acerca de su comprensión de los contenidos simbólicos e ideológicos que postulan los documentos fundantes de la asociación. También platican sobre temas cotidianos, más de los que atañen a las dinámicas sociopolítica y cultural donde participan. Las intervenciones que realizan los masones en las reuniones, se distinguen porque son lecturas de textos escritos…
Las siguientes líneas que trasladó son un conjunto de interrogantes: ¿qué es una publicación masónica? ¿para qué sirve? ¿con quién dialoga la publicación masónica? ¿cómo es elaborada una publicación masónica? ¿cómo se sostiene económicamente? ¿quién lee una publicación periódica masónica? ¿cómo la lee? ¿quiénes se oponen a las publicaciones masónicas? ¿por qué se oponen?
El tercer párrafo dice: “Los francmasones han utilizado los impresos para transmitir los temas que les atañen, como su normatividad y las manifestaciones simbólicas que están vinculadas a sus actividades rituales. También publican las concepciones que forman los masones en relación con la actividad ritual y las expresiones que formulan acerca de los hechos externos a la actividad propiamente masónica, pero que se genera en la misma actividad, como los derechos del hombre, la beneficencia, la enseñanza pública, el republicanismo y el liberalismo.
Marco Flores
Interesado en concluir los pendientes y en procurar definir las prioridades del semestre próximo, no se aventuró a poner el disco seis de la temporada uno de West Wing. Primero optó por registrar las libretas de las anotaciones cotidianas; pero se detuvo en ellas, leyó detenidamente parte de los pasajes que tienen los cuadernos… y lo hizo sin música, pese a que tenía de uso continuo el CD de A Brokedown Melody. Primero abrió la Urman©, la que tiene pasta ilustrada con una de las obras de Vincent Van Gogh –es la que utiliza para escribir los guiones que comentará-. Ahí vio las ideas que anotó para formar el texto que leyó en la presentación del libro Juárez su obra, su tiempo y su mundo jurídicos. [Este lo coordinó José Enciso Contreras y lo editó el Poder Judicial del Estado.] En una nota al margen asentó que los párrafos iniciales provenían del texto que redactó para el prólogo de un libro de don Ernesto Juárez Frías, mismo que aborda el transcurrir del presidente Juárez por el territorio de Zacatecas. [El libro, al no aparecer en el periodo de las celebraciones oficiales del bicentenario del presidente liberal, le generado el escepticismo de sí el impreso tampoco circulará en la comunidad.]
No lo dirá, ni lo asentará, pero del último párrafo que leyó, es el que más pensó y enfatizó [en el dice]: “Y como el título del libro lo señala, se hace hincapié en la perspectiva de la nueva historia, la que analiza sin monumentalizar con datos. En este documento se proporciona el contexto de Juárez García y el legado que propició su investidura y las leyes que le correspondió promulgar. En este sentido, el libro antes que un monumento don Benito Juárez, se presenta a Juárez que es un abogado que litiga, que discute en los tribunales, es un abogado que se integra a una sociabilidad de pares abogados, es alguien que participa en política, es un político y es un sujeto del poder legalmente constituido. Es también un escritor y un lector. Los ensayos del libro que se presenta nos proporcionan notas comprensivas sobre su dirigencia extremadamente legal y, distintivo del siglo XIX, de su dirigencia legal rutinizada al dominio tradicional”.
La siguiente libreta que ojeó fue la Urman©, la que destinó para las notas de su tesis. En ella se detuvo en las hojas que contienen las referencias de las publicaciones periódicas de las logias mexicanas. Procuró localizar más datos que le ayudaran a cerrar el ensayo que redactó para un coloquio sobre periódicos decimonónicos que se celebró en Morelia, en el mes de octubre. Recorrió las hojas, pero sabía que no era necesario citar más, sino que el acto necesario y siguiente era reflexionar, para continuar con la construcción del corpus hemerográfico masónico del territorio mexicano.
De la libreta transcribió tres párrafos. No dudo que en su momento también los traslade a la tesis, porque justo son de las líneas que más le interrogaron en el coloquio. Por cierto, los párrafos que utilizó provienen de redacciones que hizo en días distantes. Esto se nota tanto en el color de las tintas, que son en azul y en negro [pero ambas provienen de plumas Bic Grip Roller©], como en las referencias bibliográficas que colocó en los márgenes de las hojas respectivas. El primer párrafo dice: “Además de ser una asociación formal voluntaria, la masonería es una sociedad de hablar y de escribir, por lo tanto es formadora de opinión. En su seno, los asistentes dialogan permanentemente acerca de su comprensión de los contenidos simbólicos e ideológicos que postulan los documentos fundantes de la asociación. También platican sobre temas cotidianos, más de los que atañen a las dinámicas sociopolítica y cultural donde participan. Las intervenciones que realizan los masones en las reuniones, se distinguen porque son lecturas de textos escritos…
Las siguientes líneas que trasladó son un conjunto de interrogantes: ¿qué es una publicación masónica? ¿para qué sirve? ¿con quién dialoga la publicación masónica? ¿cómo es elaborada una publicación masónica? ¿cómo se sostiene económicamente? ¿quién lee una publicación periódica masónica? ¿cómo la lee? ¿quiénes se oponen a las publicaciones masónicas? ¿por qué se oponen?
El tercer párrafo dice: “Los francmasones han utilizado los impresos para transmitir los temas que les atañen, como su normatividad y las manifestaciones simbólicas que están vinculadas a sus actividades rituales. También publican las concepciones que forman los masones en relación con la actividad ritual y las expresiones que formulan acerca de los hechos externos a la actividad propiamente masónica, pero que se genera en la misma actividad, como los derechos del hombre, la beneficencia, la enseñanza pública, el republicanismo y el liberalismo.
Marco Flores
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